Capítulo 11.
Si dijeran que Jungkook no estaba nervioso sería mentira.
Hoy era lunes, ya tenía todo preparado bueno casi todo, solo le faltaba la rosa para el cortejo, su mamá ya le había mandado la dirección, tuvo que pedir permiso para faltar.
Bueno en si le pidió permiso a su papá, así que no hubo problemas.
Se levantó temprano, pero antes de salir fue a la habitación del omega que se encontraba profundamente dormido, con su cabello dispersado por su frente. ¿Qué persona podía ser tierno al momento de dormir? Él sabe que solo Jimin.
Se acercó y le besó la frente.
—Hasta luego omega —y con eso bajó a tomar desayuno y después fue a despedirse de sus padres que estaban despiertos.
Salió de la casa, se subió a su auto y empezó a conducir a la dirección enviada.
Una vez llegó se estacionó y fue a la tienda que de nombre tenía "Florería para cortejo", raro la verdad.
Una vez adentro se encontró con dos betas y una omega.
—¡Hola! Bienvenido, ¿en qué te podemos ayudar? —dijo la omega sonriéndole.
—Me recomendaron este lugar para poder elegir una rosa para mi cortejo —respondió sonriendo.
—Oh por su puesto, déjanos ayudarte —esta vez respondió el joven beta.
—No, de este me encargo yo —declaró el beta mayor de edad—. Sígueme hijo —lo llamó para entrar por detrás de la tienda donde habían un montón de flores.
—Dime joven...
—Jungkook —le dijo sonriéndole.
—Dígame joven Jungkook, ¿cómo es su omega?, para poder ayudarte —le preguntó el beta.
—Es hermoso, tiene un gran corazón, te trata con amabilidad, pero eso si, si lo haces enojar es mejor no estar cerca de él —rió recordando como lo empujó de la cama por decirle algo sobre su estatura—. Tiene ojos azules, esos hermosos ojos azules que te hipnotizan y te dejan todo tonto —suspiró como todo un adolescente enamorado—. Cuando sonríe sus ojos parecen dos líneas y también... —se quedó ahí porque el beta lo interrumpió.
—Oh joven, usted está muy enamorado y creo que tengo la rosa indicada —le respondió sonriéndole y haciéndole una seña para que lo siguiera.
—Esta es un rosa azul —señaló la flor.
—Te diré el significado y porque podrías elegirla, para comenzar: ¿Tu omega tiene ojos azules verdad? —preguntó a lo que el pelinegro asiente—. Bien, la rosa azul se considera una flor extraordinaria. Es por ello que regalar o recibir estas, expresa la necesidad de transmitir a una persona que es única, especial e imprescindible en tu vida. Además, el significado de las rosas azules apunta a transmitir confianza, fidelidad, afecto y reserva. Es por ello que resultan una gran opción si quieres obsequiar a alguien de tu entorno más cercano al que deseas transmitir todos esos sentimientos. Un ramo de rosas celestes o azules es el regalo perfecto tanto para la pareja como para familiares o amigos especiales —le dijo sonriéndole al alfa, que se lo quedaba mirando fascinado por todo lo que dijo.
"Cómpralo, no lo pienses"
Anouk declaró igualmente encantado por las palabras dichas del señor.
Jungkook sabía que ya había encontrado la rosa, ya tenía todo, era hora de empezar con el cortejo.
✧✦✧
Jimin ya estaba cambiado y todo, puesto que Jungkook le había mandado un mensaje diciendo que a las ocho de la tarde pasaría por él para llevarlo a un lugar especial, preguntó a donde pero dijo que era una sorpresa.
No iba a mentir, estaba emocionado y a la vez nervioso, incluso su omega estaba así.
"¿Para qué crees que nos llamó?"
Preguntó Jimin extrañado.
"No lo sé, pero me emociona"
Respondió contento Rayco.
Iba a responder pero tocaron su puerta.
—¡Pero que hermoso te ves! —exclamó Misook viendo a Jimin.
—Gracias Misook —respondió sonrojado el omega.
—No hay que agradecer, eres todo un omega hermoso —le dijo sonriendo, hasta que recordó a qué venía—. Jungkook ya está abajo, te está esperando —avisó.
—Oh si, ya voy, adiós —dijo despidiéndose con la mano mientras bajaba las escaleras.
—¡Adiós cachorro! —respondió desde la misma manera.
Jimin ya una vez abajo, abrió la puerta encontrándose a Jungkook con una camisa blanca con un jean negro y botas marrones.
Por la luna. ¿Por qué todo le quedaba bien?
—Hola Jimin —saludó sonriendo—. ¿Listo para irnos? —preguntó acercándose al omega.
—Si tonto —respondió sonriendo.
En eso los dos empezaron a caminar hacia el auto y se subieron, el viaje fue tranquilo en un cómodo silencio, Jimin veía como poco a poco salían de la ciudad, no quiso preguntar pues ya sabía cual iba hacer la respuesta.
—Duerme Jim, todavía falta para llegar —le dijo el alfa y el omega asintió ya que tenía un poco de sueño, recargó su cabeza en la ventana y se quedó poco a poco dormido.
✧✦✧
Jungkook estacionó el auto en un lindo restaurante al aire libre junto a un lago, tenían el lugar solo para ellos.
—Jimin —Jungkook acariciaba su cabello tratando de despertarlo.
El omega se removió inclinándose más hacia la mano pero no abrió los ojos.
—Vamos Jim, despierta —llamó esta vez agitándolo un poco.
—¿Kook? —preguntó abriendo sus ojos poco a poco—. ¿Llegamos?
—Si, vamos esto va a ser especial —le dijo emocionado.
Una vez Jimin despierto, salieron del auto y se dirigieron al restaurante, no había nada a excepción de las personas que lo van atender, Jimin estaba emocionado al igual que Jungkook.
Se sentaron en una de las mesas que tenía vista al lago y en eso llegó el mesero, era un beta.
—Muy buenas noches, mi nombre es Jinseo y hoy seré el que los atienda —le sonríe a la pareja—. Aquí les dejo la carta, cuando ya hagan decidido solo levanten la mano y estaré aquí —les entrega las cartas y se retira.
—Sol, ¿qué vas a pedir?—ese era un nuevo apodo para Jimin.
En las últimas semanas el alfa lo había estado llamando así y no le molestaba le encantada el apodo.
—Creo que solo espagueti —le sonrió al alfa.
—Bien, creo que también pediré lo mismo —dijo el ojiverde también sonriéndole.
Jimin en los últimos meses había mejorado su alimentación, a veces si dejaba un poco la comida, pero mayormente se lo acababa, claro con ayuda del alfa y su familia pudo mejorar.
Llamaron al beta y pidieron su orden, dijo que dentro de un rato ya estaría listo, mientras empezaron a hablar de cosas banales, empezaron a hacer chistes, cabe admitir que aunque los chistes del alfa no eran del todo buenos, a Jimin le hacían reír.
Llegó la comida poco tiempo después y empezaron a comer, mirando al lago y la luna llena en lo alto, todo en un silencio cómodo e intimo, el omega cerró los ojos sonriendo, todo estaba tranquilo y en paz, le gustaba eso, la compañía del alfa, le agrada.
Ahora era el turno de Jungkook de empezar todo, cuando terminaron de comer, Jungkook llevó al omega al muelle, allí había otra mesa, lo sentó ahí y después regresó al restaurante, y regresó con una guitarra en la mano, Jimin estaba un tanto confundido.
—¿Jungkook qué haces? —preguntó el omega.
—Amor —le dijo el alfa, captando la atención del omega era la primera vez que era llamado así—. Yo te compuse una canción, te traje aquí porque quería demostrarte todo lo que siento en una canción —le contestó, en eso el alfa levantó la mano dando una indicación, el castaño iba preguntar hasta que sonó una música. Jungkook empezó a tocar su guitarra siguiendo la melodía.
Sweet creature
Had another talk about where it's going wrong
But we're still young
We don't know where we're going
But we know where we belong
And oh we started
Two hearts in one home
It's hard when we argue
We're both stubborn
I know, but oh
Sweet creature, sweet creature
Wherever I go, you bring me home
Sweet creature, sweet creature
When I run out of road, you bring me home
Jungkook miraba como su omega soltaba pequeños sollozos, mirándolo con una sonrisa.
I know when we started
Just two hearts in one home
It gets harder when we argue
We're both stubborn
I know, but oh
Sweet creature, sweet creature
Wherever I go, you bring me home
Sweet creature, sweet creature
When I run out of road, you bring me home
You'll bring me home
Una vez que terminó Jimin se abalanzó en él para abrazarlo muy fuerte mientras lloraba.
—Gracias, gracias, gracias —decía el ojiazul escondido en el cuello del alfa, mientras este lo abrazaba y lo mecía para que se tranquilizara, el pelinegro estaba feliz de que al omega le haya gustado su canción.
—No tienes que agradecer Jimin —le dijo sonriendo—. Pero aún tengo que hacerte una pregunta y necesito que salgas de tu escondite —habló divertido, a lo que el omega soltó una risita y salió del cuello del ojiverde para mirarlo con sus ojitos brillantes.
—Dímelo Kook —le sonrió.
El alfa lo hizo pararse y quedar al frente de el, después se arrodilló y detrás de él sacó una rosa azul, el omega era un mar de lagrimas otra vez.
—Mi pequeño omega. ¿Me dejarías cortejarte? —le preguntó sonriendo con sus ojos cristalizados Jungkook.
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